domingo, 6 de diciembre de 2009

Rosario

Las cuentas estaban nuevas
cuando llegó a vos.
Fuiste pasándolas con mano erosionadora,
rasgando los misterios con el puño cerrado.
En cada descanso colocaste más pesada la cruz,
cantando antes victoria.
¡Desgranaste tan veloz y mecánicamente!
Poco te importó disfrutar acariciando cada tramo.
Meditaste tan poco cada palabra,
pusiste tan poco cuidado en el regalo
que entre tus dedos se escapaba,
que cuando llegó el momento de profesar
el final y supremo acto de fe,
no pude creerte.

domingo, 25 de octubre de 2009

A un océano de distancia

A un océano de distancia,
la que una vez fue.
A un océano de distancia
alguien que no volverá a ser ya más.
Dos continentes.
Dos orillas.
Dos personas.
Un océano que pareciera separar dos mundos.
La que será se debate entre dos costas
mientras las olas eternas llevan recuerdos de una tierra a la otra
en un vaivén nostálgico y fascinante.
En el océano se funden, embravecidas,
locas creaciones,
un sinfín de posibilidades
y ya no se distinguen los límites de lo que fue
lo que es,
lo que puede ser
Solo queda la espuma de una efervescencia
de sal y misterio.
Solo el bravo cambio de mareas
y la seguridad inmortal del canto de las caracolas.
El océano se vuelve un extraño punto
de unión y distancia,
un permanente devenir
y ya no importa que orilla pises
porque las olas volverán incansables
a lamer las arenas,
llevándose en cada nuevo viaje un poco de tus recuerdos.
Un poco de vos.
Desparramándote por el mundo.
Es el mar el que a la vez que nos separa
nos une con los que fuimos
y los que seremos.
Es en este mar en el que todos somos;
viajeros eternos.
Donde burlamos a la muerte
y vivimos cientos de existencias.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Producto de musas cruzadas

Mi querida bitácora:

Estuve pensando. Sé que no es algo que haga muy a menudo, ya que suele insumirme una cierta cantidad de tiempo ¡Y qué cierta! Cada vez que empiezo a googlear los abismos más insondables de mi psique (si, son abismos) me pierdo en eternas elucubraciones que me dejan más abatido que bajel arreciado por la furia tritónica.
Después de cada una de esas abismales caídas tardo grande tiempo en recuperar la capitanía de mi persona (y la de mi nao – ya que, cuando perdido me hallo por los bosques de la vida, mi persistente y amotinado segundo al mando, toma mi primer puesto). Es por esto que me resulta poco provechoso el pensar. Por una parte. Además, el pensar suele traer consigo esas consecuencias sine cuá non que son las conclusiones. Es decir, uno, si piensa, tiene que hacerse cargo de lo que pensó. Por más que no lo comunique. Queda adentro. Pero quiere salir. Se amotina. Como mi segundo al mando. Entonces, además de recuperar la capitanía de mi nao, tengo que recuperar la de mi persona acallando mi segundo al mando y sometiendo mis pensamientos. Es complicado.
Te preguntarás en qué pienso, mi querida bitácora (ya sé que eres una construcción mera, que no contestarás, pero aún así, te interpelo, ya que eres la única que conoce lo más profundo de mi ser y que, al no tener cómo, has permanecido a mi lado, sin salir corriendo como todo el que se asoma a mi ser. Ninguno que haya conocido las profundidades ha logrado remontar a la superficie. Como decía, mi querida bitácora, guardiana obligada de los secretos de mi alma, reutilizado palimpsesto, volumen de horrores, compendio de iniquidades, códice del infierno, diario maldito, inconfesable secreto, sucio relato, infesta descripción, locura prosada, grotesca relación (la que mantenemos), desgarrado suspiro, ecos del abismo; en fin, mon cheriè memoire. Como te decía, estuve pensando y te preguntarás en qué. Pienso en la Carabella. Y en Juan. Mi mujer y su bastarda, respectivamente. Creo que las extraño. Han pasado ya casi seis años de la última vez que las nombré. Cuando uno no nombra algo, lo va matando de a poco. Porque nombrar da vida a las cosas… y a las personas. Las manifiesta, las convierte en carne. Cada cosa y cada persona tiene tantas vidas como veces es nombrada y, al mismo tiempo, estas vidas pueden ser tan diferentes como diferentes son los que las nombran. Es por eso que dejé de nombrarlas. Fue mi forma de matarlas ¿Por qué? No sé. Eso es lo más curioso. No hay que tener siempre un motivo para el asesinato. Es bastante más fácil así en realidad. Uno mata (algo que, al fin y al cabo, es más rápido y menos complicado de lo que -por la tranquilidad de todas las almitas que pueblan esta tierra- nos lo pintan). Como decía, uno mata. Hay veces que uno mata por un motivo y hay veces que uno simplemente mata. El problema con los motivos es que se pueden prestar a debate y, tanto a la gente, como a la conciencia, le encantan los debates. Entonces, uno se queda con un montón de voces que lo cuestionan, que le hacen repensar los motivos, que lo ponen en duda, etc, etc, etc. En cambio, si uno mata sin motivo, ahí termina todo, la acción de matar, la vida del aludido y cualquier tipo de cuestionamientos que la conciencia del matador o cualquier sujeto lleno de buenas intenciones y/o principios pudiera hacer.
Entonces, como decía, a la Carabella y a Juan, las maté. Pero bueno. Ahora, me dio no sé qué. Pienso en la Carabella, abandonada en el puerto (hay nombres que condenan el futuro del que los carga). La panza, que en ese momento pensé que prometía un recio grumete y que después me salió con la sorpresa de una hembra. Sabrás que por un tiempo me hice cargo de la cría, que no era mía; no sólo porque en mi familia sólo engendramos hombres, sino porque a esta la había engendrado otro capitán, según me contó la Carabella preñada, a quien conocí por primera vez en el Puerto de Palos (después lo pavimentaron). Como dije, un tiempo estuve con ellas, la Carabella tenía el rancho en la justa mitad entre el puerto y la taberna. Más cómoda no me podía quedar. Pensé que, ya que la había desposado toda grávida, lo menos que haría era darme un grumete. Me costó acostumbrarme a la idea de que eso que lloraba todas las noches estaba destinado a repetir el destino de su madre y no el mío, porque uno de los dos destinos tienen que repetir los hijos; y está claro que una mujer al mando de una nave encallará en el primer escollo que le pongan los mares y que un recio grumete no puede pasearse encinta por el puerto.
Claro que debería dejar constancia de que la que realmente perdió la vida, ya sea por mis acciones indirectas o por las directas ordenes de acción que di a quien en el último viaje la embarcare, fue la Carabella. A Juan la arrendé… pensando que ya que había gastado de mi propio y sudado peculio (eso es por ocultar los rublos bajo el sombrero) para un par de mamaderas Chiquito y dos cajas de pañales Pampper Oruga Flex, lo menos que podía hacer era cobrármelos por medio de un provechoso contrato con las monjas tibetanas.
Ahora que las he nombrado vuelven a cobrar cuerpo frente a mis azorados ojos. Más azorados que nunca porque la Carabella ha fenecido tiempo ha y, como cualquier hijo de vecino que tenga dos dedos de frente podrá sospechar, uno se alza flor de julepe al ver no sólo a su enamorada de juventú, sino a su víctima fatal manifestársele una noche de obscena borrachera en el quicio del camarote. En fin, será sacar de quicio a su fantasma, como ya hiciera tantas veces con la versión original, para poder conciliar el sueño y esclarecer mis temores o llenarme de obscuras certezas.
No obstante, cabe destacar que sin embargo, el problema no es solo la Carabella manifiesta, sino la otra efigie que torva me mira por el ojo de buey. No sé cómo ha llegado hasta el ventanuco de mi camarote, disimulado arquitectónicamente entre los varios de mi nao, iluminado por sendos reflectores ultravioletas y precedido por una alfombra de piel roja (sintética, no nativa). Así es, bitácora benemérita, mientras deslizo la punta de mi lápiz Faber Castell Nº2B por tus ásperas páginas miro de reojo y sin resolverme a levantar, bravo, la mirada, una silouette y unas facciones que, por guardar acusadoras e ineludibles semejanzas con quien les diera la existencia (y a quien yo otorgare la muerte), no pueden ser de nadie más que de Juan. La forma en la que a intervalos regulares se empaña el cristal denuncian unos furibundos ataques de asma que vienen a cobrarse la poca cordura que me queda desde la noche de los tiempos (como el coche aquel de Jorge Luis).
No sabiendo cómo más pretender que no estoy al tanto de la amenazante figura que se cierne sobre mi, ni pudiendo escribir ya más (se me han acabado los palimpsestos A4 y el cargamento de repuestos no llegará hasta mañana) intentaré simular que los dionisíacos dones han dejado mi persona irredimiblemente abandonada a los brazos de Morfeo. Te guardaré, mi querida bitácora, bajo mi almohadón de plumas y colocaré mi cuerpo en posición fatal sobre el jergón (no sin antes correr, con la vista en el piso, el dosel), de espaldas al pasado y confiaré en las siete llaves que guardan mi puerta.

jueves, 27 de agosto de 2009

Qué hemos hecho!!!!

Como algunos saben, doy clases particulares. Hay de todo en esta viña del Señor y está bueno que algo de todo eso me reditúe...especialemnte ahora que dejé el trabajo desueldoestableymensual y sigo con ganas de viajar. Anyway, una de mis alumnas está viendo poesía en el colegio y el librito del que se nutren las mentes de estos jóvenes perdidos para Dios y el mundo no vio mejor forma que "enseñarles" sobre poesía que dándoles una serie de actividades en las que, a partir de frases o palabras, tienen que formar un poema. Mientras ella hacía el suyo, yo me dediqué a hacer otro pastiche con la misma consigna, en un arranque de curiosidad y falta de otra actividad...
Esto es el resultado de la poca imaginación y ganas de los manuales de hoy en día. Según la caja y las instrucciones, lo que se armaba era un poema vanguardista. Ahí va:

Este soy yo

Arrancó el nuevo subte.
Dispuestos a correr el riesgo
de una elección crucial
los pasajeros se suben a aquel amor de música ligera
que canta una sola voz.
Dice que mi corazón es suyo
mientras habla de pruebas de fuego
con las que no nos vamos a conformar.
Llega la madrugada y el canto se apaga
como el secreto mejor guardado.
Palidece la luna.
Dos estrellas más
y el sueño está cumplido.

Puede que haya quedado algo simpático.......no ocstante, lo veo más para acompañar un chocolate Dos Corazones que para los anales de la poesía. La vanguardia de manual es un cachetazo a Girondo, bah...

jueves, 6 de agosto de 2009

Querida Bitácora

Sois sólo tú la que registráis mis cuitas y mis cuotas, sólo a vos puedo desnudaros mi alma aguerrida y mostraros mi verdadero yo (tierno y reservado). Sé que para el orbe todo soy un Kpitán incomprendido, hale sucedido a los mayores genios; siempre adelantados a sus tiempos. En mis tiempos yo también supe ser un adelantado. Fue así que logré ganarle de mano a mi colega Cristóbal en su vuelta al mundo en 80 días.

Supe que América quedaba frente a la ibérica península, ni bien cruzado el océano y eviteme -gracias al astuto artilugio de leerme hasta el final la carta de navegación- meses de perdición en los líquidos dominios de Poseidón, llegando mucho antes de que el Nuevo Mundo fuera descubierto. Ya había puesto yo pie sobre las tierras -y culturas- del lugar, habíales cambiado su monótona religión de un único Dios verdadero (uno un tanto esquizoide, ya que se trataba de tres personas en un mismo cuerpo) por un carnavalesco y divertido politeísmo con ofrendas culinarias cuando llegó Cristóbal y su ballet estable –un tanto mareado y desestabilizado por la mar que no estaba serena- repartido en tres naos a querer conquistar lo que ya estaba conquistado, convertir a los conversos y hacerse con el oro que mis fieles aborígenes bruñían para mí. Si bien gruñí a Cristóbal mientras los aborígenes bruñían el oro, no pude hacer mucho…conquistolos con castañuelas y espejuelos. Una vez que las indias tuvieron donde mirarse no hubo forma de que volvieran a mirarme a mí. Habían conocido la belleza…y la belleza no era yo… Además, el mandato y el poder de Cristóbal eran reales. Hubo que volver al monoteísmo esquizoide, conseguir mano de obra barata –por suerte el sindicato aborigen no era tan fuerte en esa coyuntura histórica, ni la clase obrera tenía consciencia de tal (de tal modo que podía ser coaccionada)- y cargar las naves para los reyes españoles que siempre esperan que la gente vuelva de viaje llena de regalos para ellos.

Pero en fin, basta de exordio de genio vencido, vamos al tema que nos compite. Yo. Y mi añoranza y confusión. Habiéndome zarpado con rumbos desconocidos, una vez más, recalé en los puertos australes del Ecuador, donde los tórridos calores hacen yervir la sangre de las nativas poniéndolas a punto caramelo para ser el postre de mis bacanálicas cenas. Si bien las voluptuosas carnes mulatas de estas impúdicas laosianas logran apaciguar momentáneamente el fuego que me consume, sigo recordando con húmedas y rojas pupilas añorantes los tiernos ojos de mi Carabella, su mirada de cervatillo asustado cuando me veía venir, sus caricias que recorrían mi cuerpo temblorosas a causa del párkinson, sus suspiros y jadeos en mi oído cuando perdía el nebulizador, su tersa melena y su ondulada piel, su amplia sonrisa de pulposos labios carmesí que dejaba ver todos sus graciosos y blancos dientecillos – los tres que tenía. Recuerdo también cuando tierna y coqueta me hablaba con su media lengua –la otra mitad la había perdido por atacar golosa y desesperada un choripán en la rambla.

Ahhh, querida Bitácora, al lado de estas hembras calenturientas y entregadas que comparten mi lecho noche tras noche, el recuerdo de mi querida y hermosa mujercita me acecha los sueños. Me pregunto azorado qué habrá sido de su graciosa personita cuando la envié a ese viaje sin retorno a bordo de un buque amigo. Me pregunto por dónde andará su alma en pena, lejos del Kpitán que con la misma locura que le amó le mandó matar ¿Recordarán acaso las almas? ¿Reservará para mí sólo tiernos pensamientos? ¿Qué habrá sido de Juan, la hija que nunca quise, ese ser regordete y llorón que clamaba por comida con más frecuencia con la que clamaba yo? Veinte años han pasado ya desde que la dejara a cargo de las monjas tibetanas. Pocos abriles contaba la última vez que la vi correr por los pasillos de aquellos templos rumbo a la que sería su morada. Cumpliose ya el tiempo en el que debería permanecer, según el contrato de arrendamiento que firmara con las monjas, en contemplativa adoración de Vesta, su diosa. Sé que ahora debo ir en su busca y arreglar un casamiento que me reditue y que ponga fin a esta innecesaria culpa. Pero sé que en su rostro veré a su madre –le mandé a tatuar a mi Carabella en una mejilla para que no le olvidara. Y es ese rostro el que temo, ese enfrentarme al pasado que tantos rublos desembolsé para olvidar.

¿Qué hacer, oh mi Bitácora? ¡¿Qué hacer?!

Callo ahora apesadumbrado y dejo que la duda descanse en la punta de mi birome bic.

La lujuria llama incitante a mi puerta con suaves golpes morenos.

viernes, 17 de julio de 2009

3ª y última parte de la bio

Esto es todo lo que se tiene sobre sus días con Carabella. Después de eso, el Kapitán se dedicó a su barco. Lo bautizó El Terror de los Mares, El Terrooooor, pero de cariño le decía Mi pequeña Navecita, que infunde terror en los mares, infunde. Comprose también en una subasta un loro, verde chillón, y lo llamó Loro, se compró una pata de palo, porque todavía tenía enteras sus dos piernas de él, y la llamó Pedrito, por último compró un garfio de gala y un librito de la Colección Billiken de Bolsillo con las aventuras de Simbad el Marino. Vio que todo esto era bueno, y como era domingo, decidió descansar, además era el séptimo día de compras por el muelle y estaba harto.
Tiempo después, partió con rumbo desconocido, ya que todavía no había podido descifrar lo que decía la carta de navegación. Su tripulación estaba compuesta, al principio, ya que más tarde comenzaron a marearse con el vaivén del barco. Pero al poco tiempo, el Kpitán logró sacarlos del sopor del mareo y levantarles la moral al grito de “¡Féminas enclenques, no les doy más de tres segundos –le gustaba usar el cronómetro de su reloj pulsera- para que traigan a cubierta sus perezosos traseros y trabajen, a menos que quieran terminar sus días como carnaza para los tiburones!!!. Espero que este comportamiento de niños malcriados no continúe cuando dejemos el muelle y nos hagamos a la mar. Sin otro particular me despido de Uds., Atte. Sánchez, Kapitán al mando”.
Así comenzó pues la vida marítima de nuestro Kpitán. Me gustaría ahora incluir en esta breve reseña con algunos fragmentos de su bitácora, sólo para probar la veracidad de sus increíbles viajes. O ¿Qué se piensan ustedes, qué esto no es una investigación llena de hechos verídicos, contados por mí, absteniéndome a la crónica, los documentos y la realidad? ¡Joder!


“Hoy llegamos a tierras Jamaiquinas, dónde nos recibió la Zarina, con gran lujo, y nos obsequió con un sushi típico de ese continente... Bailamos Lambada”


“Acabamos de recalar en India, la Primera Geisha no recibió y nos prometió un recorrido por sus míticas tierras(...) Hoy nos despedimos de la Primera Geisha, que nos obsequió con un delicioso asado, y nos regaló un sari, vestimenta masculina típica de los habitantes del lugar”


“Encallamos en Atlántida, pero por suerte, fuimos bien acogidos, y tenemos planeado pasar un tiempo aquí para restaurar los frescos de la nave, que sufrieron daños a causa de la coalición”


“ Japón, bendita tierra de pingüinos y koalas, nos recibió con todo el esplendor de sus canales y carnavales enmascarados”


“La Aurora Boreal de los puertos del Perú, nos maravilló, y decidimos pasar el verano en esta tierra del Sol de Medianoche”


“Llegamos a Egipto, hogar de filósofos y magos. Recibidos por Isis fuimos introducidos en la cohorte del faraón, donde, como, marineros de mundo que somos, saludamos con un par de irreverencias a cada uno de los nobles integrantes. Ahí, escuchamos una de las audiencias de Tután, donde un tal Heráclito se quejaba de los problemas que hay para bañarse en el Nilo. Según el joven, es imposible, entre los barcos de esclavos, los Moiseses con bebeses que flotan a la deriva, y lo caro que están cobrando el agua. No hay forma. (...) Como despedida, nos dieron un tour por la impresionante pirámide de Moctezuma Jr.”

Con esto concluye esta pequeña reseña, pero quiero aclarar que el Kpitán continúa navegando por los anchos mares, azotándolos con su mano de hierro, y trabajando duramente de sol a sol para poder abrir su propia cadena de ropa: “Nautique”.
Más adelante, se podrán ampliar los datos sobre este curioso personaje, que continúa en la lucha por mantener reservada su vida privada, y haciendo poco caso de los comentarios que causan sus impactantes revelaciones acerca de sus problemas personales, y que “a nadie le incumben”, como aseveró en su última rueda de prensa.

martes, 14 de julio de 2009

That was Spartaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!

Quién no se puso alguna vez a recordar su infancia? Siempre hay un momento para el todotiempopasadofuemejor...pero muchas veces, el ilumnismo que nos traen (o no) los años, nos echa en cara que, si bien puede haber sido mejor, tuvimos suerte de haber salido vivos de aquellosañosdorados.

Si recordamos nuestras primeras primaveras y las que le sucedieron, veremos que estuvieron pobladas de golosinas y diversiones tan dulces como peligrosas (y acá no se hace alusión al título de ninguna película de porristas norteamericana y olvidable).

Mucha tinta ha corrido al respecto de este tema, que posiblemente se amplíe en publicaciones posteriores (si la autora siente que se le canta), pero en esta entrega va la repruducción de los fragmentos autorizados de una breve charla ilustrativa surguida a propósito del estado de una loca linda que tengo de amiguita en el Facebook.

El estado reza (la Iglesia y la política siempre entongadas!!! comentario al margen. De corte naif pero necesario): "vamos por algo en conjunto: CON 10cent, QUE SE PODIA COMPRAR?... vamos todos a coparse!..."

A lo que siguiole los comentarios de:

Polly: un chocolatin

Ro Ro: dos harinitas (con cucharita de plástico incluida) o dos mielcitas (las de dulce de leche!! mmm)
antes había mucho del 2 x $0.10....ahhhh, la belle epoque!!!

Polly: un par de chicles DINOSAURIO!!!

Lo anterior debe servir para poner en clima y órbita al lecto, a la vez que le contestualiza el momento comunicativo. Agora si, la charla fragmentada:

RoRo
copose con los recuerdos en conjunto!


Polly:
buenas

RoRo
y santas


Polly:
ja... no recuerdo el 2 x 1

RoRo
no recuerda?!!?
caramba!!!
esa es una laguna grave!!
hubo mucho de promocion en esa epoca

[Acá se sucede un breve interludio en el que una de las interlocutoras amenaza con ir a bañarse a lo que la otra le responde con un beneplácito acogimiento de la idea en el que se evidencia lo apremiante del ritual higiénico. Se realiza un somero intercambio de palabras durante el cual la interlocutora A (no necesariamente en orden de aparición) se muestra ofendida y aireada por la afrenta plasmada en forma de duda manifiesta de su estado de limpieza. Acto seguido la interlocutora B promete no divulgar la (no)condición de pristinidad de la interlocutora A, ya que reconoce que su amistad no llega a tanto lazo de confianza -debido a su recientez. Una vez aclarado el pormenor, se reanuda la charla en los siguientes términos:]

Polly
se acuerda los chicles dinosaurio?

RoRo
siiii!!! me acuerdo
los dinovo!!


Polly
los mejores!

RoRo
en la cajita de güevos venian
era todo escenificado y barato....


Polly
le dabas dos mordidas y los tirabas poruqe se hacian mierda

RoRo
sisisi
de utilería, pero bonito el empaque
como todo lo condenado a no durar, bah


Polly:
jaja

RoRo
y los caramelos bolones q eran como para matar a alguien?


Polly:
las gallinitas eran 2 por 10 o una por diez?
con esos estaban chochos los dentistas!


RoRo
mmm
creo q una x 15
los heladitos eran de 10
el juguito encarecia la gallina


Polly
esos helados de mierda!

RoRo
no se x q


Polly
jaja

RoRo
sisi...eran un merenguito pintado c cucurucho humedecido
un asco
las ahogadas con las harinitas....


Polly
jaja de una!

RoRo
sabe q lo pienso y entre los bolones, las harinitas y demases golosinas,


Polly
y las escupidad de arinita
harinita


RoRo
sobrevivir a la infancia era todo un tema!!!


Polly:
hay que publicar esta charla

RoRo
si no morias presa de uno de esos peligrosos dulces te traumaba jose miel con su mama muerta
fue una infancia dificil.....


Polly
jajaja
de una!


RoRo
sisi, hay que publicarla!!!
me cede los derechos para el blog?


Polly
si de una!

RoRo
q vi q me sigue, tante gratzie!
y los jugos helados?


Polly
como que se corrian muchos peligros...
andar en la calle, la bici, comer los bolones, el barro


RoRo
seguro q las ratas les caminaban x encima!!! y aun asi, ni una gripe A ni peste bubónica


Polly
nada de videojuegos

RoRo
eso de formar los líderes del mañana...era una especie de trampa espartana en la q sobrevivimos los mas juertes!!


Polly
de una!...

RoRo
ademas con un toque a jansel y gretel, xq lo más mortal era lo más dulce...
ja, eso es como el nombre para otra pelicula noir


Polly
cual?

RoRo
lo mortal era lo mas dulce


Polly
ah!... buenisimo

[acá prodújose otro interludio en el que nuevamente se planeta la amenaza de ducha y se agrega el dato de que el acuoso acontecimiento se debe a la imperiosa necesidad de verse presentable para un encuentro vespertino del que no se aportan más datos. La interlocutora B se queda con las ganas de saber más]

Polly
adios
poublique, que leo


RoRo
adios
publico


Polly
con o sin acento?

RoRo
ambos?
jeje
fue sutil
;)


Polly
:)
chau


RoRo
hasta mas ver

domingo, 12 de julio de 2009

Biografía 2ª parte

Antes de seguir, me gustaría contar un poco cómo fueron las cosas con Carabella, ya que no volveremos a verla en la Historia (lamentablemente murió por accidente al ser empujada por un enemigo del Kpitán a un banco de tiburones en el Caribe).
Cuando el Kpitán la conoció, resultaba que otro Kpitán la había conocido antes, y, después de asegurarse la descendencia, la había abandonado, de esto hacía ya casi nueve meses. Tan enamorado estaba Sánchez que decidió que el se haría cargo de Carabella y su hijo (porque ya sería el colmo que encima, fuera una niña). Cuando llegó el momento el Capitán, desolado, descubrió que había sido madre, ya que el niño, era niña. Sus sueños de paternidad se hicieron añicos y la noticia la sintió como una mala jugada del destino. Enseguida la enfermera le trajo a Juan, porque ese y no otro era el nombre que nuestro Kpitán había elegido para su pequeño, que por esas vicisitudes de la vida, nació niña, y fue la primera de muchos Juanes con apariencia un tanto afeminada.
Sobre el nacimiento de Juan no se han encontrado muchos datos, ya que el Kpitán se mostraba un tanto decepcionado y re-acio a hacer los comentarios pertinentes al nacimiento de todo hijo de un personaje famoso. Lo único que se pudo extraer de un palimpsesto de la época fueron unos garabatos, presuntamente realizados por el sujeto la fecha del siniestro, aunque esto solo se presume de las poquísimas pistas que han logrado descifrar los más dedicados especialistas. Pero bien, el escrito reza: “28 de Agosto de (aquí una fecha ilegible, seguramente tratando de ocultar datos que pudieran develar la edad del Kapitán), Año del Siniestro. Querido palimpsesto: Hoy nació Juan, la hija de la Carabella. Mujer. ¡Desdichado de mí! Los hados se han burlado nuevamente de este pobre hombre impidiéndole continuar con el apellido de su familia. ¡Ni una hecatombe calmaría mi furia y vergüenza! En fin, esta mañana fui a patentarla y a rechazar los derechos de autor en la capilla del pueblo. No podía hacer nada más, se lo debo a la señora, que tan ricos me hace los arenques. Estaba pensando en cómo iba a explicarles a los amigos del puerto esta desgracia, el vástago de otro, y, además, hembra. Cuando dijeron mi nombre por el micrófono, me acerqué a la ventanilla correspondiente, y el empleado me preguntó los datos que debía ingresar en la computadora. Le dije que quería presentar los cargos por el nacimiento de Juan Sánchez, sexo femenino, pero que por favor se sirviera ponerla en “bastardilla”, ya que no era realmente hija mía.” Aquí la escritura se interrumpe bruscamente, tal vez por la pena que asolaba al Kapitán, tal vez porque se había terminado esa carilla del palimpsesto, de todas formas, tras una larga investigación, dedujimos que dándole la vuelta la escritura continuaba al reverso. “
Siempre hacen estos palimpsestos tan cortos... siempre se terminan cuando más asolado por la pena me encuentro con que se acabó el lugar, me encuentro. Estuve meditando mucho tiempo ha sobre el nacimiento de Juan, hace ya cómo media hora ché que lo vengo meditando, me parece que realmente me tocó, es uno de esos problemas bizarros que lo mueven a uno, sino, no le dedicaría tanto tiempo. Creo que lo que necesito es alejarme un poco de todo esto. Así que me parece que la voy a mandar a la Carabella y a Juan a que se tomen unas vacaciones, mientras yo me dedico al barco (tengo que bautizarlo todavía). Siempre que le pregunto qué es lo que quiere hacer (porque la noto medio tirada) me sale con eso de que: “Sol, arena y mar es todo lo que quiero ahora. Sol, arena y mar, descansar y ver las olas...”. Ahora mi amigo, el Cacho Navaja, me dijo que se iba a zarpar con rumbo al Caribe, así que tal vez las flete a bordo del Caos Oscuro, el barco suyo del Cacho; siempre se le dio esa veta de poetista para los nombres.
En fin, ahora el bebé se largó a la lloradera de nuevo, así que creo que mejor para aliviarla un poco a la señora, dejo de escribir tanta cosa y me levanto un poco para ir a ver a los changos al bar. Digo, con tanta gente en la casa la pobre debe sentirse medio abrumada, así que mejor le vaciamos un poco el rancho.”

martes, 7 de julio de 2009

Biografía - 1° parte

Bueno, acá va la 1° parte de la biografía del Kpitán, como para que lo vayan conociendo un poco más. Esto está escrito hace bastante.....el Kpitan es más joven.
El Kpitán Sánchez
Breve reseña histórica de un personaje atemporal
(Post labor limae)


Nacido en Génova, de madre española y padre (se cree que jamaiquino), fugado antes del alumbramiento. La fecha de nacimiento es imposible de precisar, ya que su masculina coquetería le impidió revelar su verdadera edad, inclusive a sus más allegados. Tampoco figura en ninguno de los registros de natalidad de su ciudad natal donde nació. En realidad, por más que figurara, no lo notaríamos, ya que el único nombre que tenemos de él es su nombre artístico, aunque se corre el rumor de que podría ser: Florindo Del Cerro, por lo que sería lógico que para causar pavura en los siete mares, en todos y cada uno de ellos, debiera cambiar su verdadera identidad por una que, por lo menos, fuera digna de respeto.
Su infancia y juventud transcurrieron. No se sabe con certeza dónde, pero si tenemos confirmado el dato de que transcurrieron. Según cuenta el mismo Sánchez en su “Autobiografía Póstuma no Autorizada” de González y González, O. Paco (1666), Islas Canarias, 2° piso, departamento C (ese que tiene un felpudo bien bonito a la entrada). “Desde niño siempre quise- confiesa entre risas y con la mirada añorante- ser Kpitán al mando de mi propia nave, pero- dice con un dejo de tristeza- sólo pude conseguir la capitanía de un barco...” En otra página, de su vida, comenta la admiración que sintió siempre por Cristóbal Colón. Al ir a examinar por primera vez el que sería su barco: “Ajáh... pues parece que pinta La Niña”- exclamó mirado con ilusión a la Carabella, una de las trabajadoras del puerto, que más tarde, sería su esposa, si bien nunca llegaron a casarse.

jueves, 2 de julio de 2009

With love, P

I've been crying myself to sleep for some nights now. I know there's no way I can change what you're going through....All I can do is to be there for you and try to make of this time the best. There are some damn facts in life that are beyond our helpless selves. For sometime now you've been drifting off, saying a long and quiet goodbye. So long. So certain. I remember one winter day years ago when I was reading The Mystery of the Yellow Room by the fireplace. You told me it was your favourite and we talked about it for hours. I remember all your stories (especially the ones you told me once and again), all their funny and crazy characters. I remember all about your family, how you admired them and how you wanted us to know them. Sometimes your eyes got wattery... I remember so many thigs...and I feel you can't remember me now. And it hurts so much! I know it's not beacuse you don't want to, but because you just can't. Because you're ill. Even because maybe you're not longer your whole self. Or is it that you are kind of becoming a child again? Maybe you are leaving this life as you came....maybe when we meet again we'll get to know each other again.....I don't know. However I do know that, even if I understand what can be expected (and maybe what the best is), my heart is breaking....but, hey, I'll keep on smiling, because you're still smiling and laughing. See you tomorrow! Love, Petronila.

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Con cariño, P

Ya desde hace algunas noches lloro hasta quedarme dormida. Sé que, por más que quiera, no hay nada que pueda hacer para evitar que pases por esto… sólo puedo estar a tu lado e intentar que el tiempo que queda sea el mejor posible ¡Hay situaciones en esta vida que se nos escapan de las manos y nos ahogan la garganta con una impotencia muda! Desde hace un tiempo te nos vas yendo en una larga y silenciosa despedida. Tan larga y tan cierta. Ahora me acuerdo de un día de invierno hace muchos años cuando estaba leyendo El Misterio del Cuarto Amarillo al lado de la estufa y vos te acercaste y me dijiste que era una de tus novelas favoritas y nos quedamos hablando horas. Me acuerdo de cada una de tus historias (especialmente de las que me contaste una y otra vez) y de sus personajes, tan locos y divertidos. Me acuerdo, también, de tu familia, de lo mucho que los admirabas y de cuánto querías que los conociéramos… a veces la emoción te inundaba la mirada. Yo me acuerdo de tantas cosas y vos ya no te acordás de mí. ¡Y eso me duele tanto! Sé que no me olvidaste porque quisiste, sino simplemente porque estás enfermo. Incluso tal vez porque ya no sos del todo vos mismo. Es como si te hubieras vuelto un chico. A lo mejor es que estás dejando esta vida como llegaste a ella y que cuando volvamos a encontrarnos tengamos la oportunidad de conocernos nuevamente…quién sabe…Lo único que sé es que, por más que entiendo qué es lo que hay que esperar ahora e incluso qué es lo mejor, se me parte el corazón. Pero voy a seguir sonriendo porque te veo reír a vos. Hasta mañana. Te quiero mucho, Petronila.

jueves, 25 de junio de 2009

Geometría de un crimen

Llegó.
Se ubicó paralelo
a mí.
Con aguda crueldad clavó su discurso
perpendicular a mi corazón
Se marchó.
Obtuso.
Sin escuchar mi último latido.
Tanto tiempo siendo complementarios....
Quedé nula.

jueves, 18 de junio de 2009

El Kpitán Sánchez frente a la Selva Negra

Sucedió un día que me encontré frente a la Selva Negra, oscura e impenetrable. Famosa por sus peligros. Una sola y compacta masa negra, como su nombre lo indica, tan grande que los ojos no podían distinguir más allá de la espesura azabache.
En ocasiones anteriores, ya me habían advertido de los peligros que esta selva guardaba, las densas capas traicioneras que me separaban del otro lado, de la luz y del Sol; y, por lo tanto, del entendimiento y la cordura.
Medité estos peligros en mi fuero más interno: la imposibilidad de vislumbrar el más ínfimo rayo de luz antes de terminar con ella, de atravesarla de punta a punta, consideré también el tamaño de tan oscura mole, y lo tentador que resultaba la posibilidad de desentrañar sus misterios.
Luego de mucho pensar, no pude más y, aún sabiendo el peligro que entrañaba para mi elevada presión, sucumbí a su hechizo.
Más allá de toda razón, tomé mi machete y comencé a abrirme paso a su interior. La negra cobertura cedió al filo del cuchillo, las paredes comenzaron a desmoronarse. Yo, resignado y abandonado, me zambullí por completo en esa locura de mousse y chocolate.
Encerrado en mi camarote pasé una hora completa entregado al dulce placer que, una vez a la semana, me proporcionaba la cocinera de a bordo, con sus deliciosos manjares. Catapultado al séptimo cielo en un torbellino de éxtasis devoré el postre por completo, hasta que de mis ojos brotaron lágrimas de dicha y, mi conmovido corazón, me instó a agradecer al dios la felicidad que se me proporcionaba.

martes, 9 de junio de 2009

Vincent

Gente: antes que nada, gracias por los comentarios!!!! Veo que comencé a interesar lectores!! Excelente!!! Hasta el magnánimo Jarold Blúm comentó!!! LOL. Espero que sigan leyendo y que me hagan sus críticas sinceras.

En cuanto logre manejar mejor esto, voy a darle un formato más personalizado al blog....eso de plantilla genérica no me va. Pero bueno, tengamen paciencia que soy nuevita en el asunto. Eso sí, si alguien me quiere asesorar, se agradece.

Como hoy no estoy con todas las Musas de mi lado (mecachoenlasmusas porque tengo que terminar el trabajo para el congreso hasta mañanaaa)...es más, no estoy con ninguna de las 9 hermanas (¡son nueveee! ¡¿cómo es que NINGUNA tiene tiempo de venir y darme bola?!), me voy a limitar a dejarles un video. Pero esto no es cualquer cosa, eh? Es el primero de los cortos animados de Tim Burton (momento de contemplación extasiada, asombro y loas) y está narrado por Vincent Price (conocido actor de cine de terror). Como siempre, Burton y su amor por los infantes extraños y perturbados (no amor en el sentido de Michael Jackson, claro -también extraño y seriamente perturbado).

Bueno el video pueden verlo aquí: http://www.vxv.com/profile=serbizarro?37339 (en realidad ese "aquí" debería quedar como un link para ir a donde está el video, sin que aparezca la dirección entera...ven? cosas como esas quiero saber hacer!!). La versión es la original, pero con subtítulos en español. Enjoy!!!

Me voy a ver si encuentro una Musa o una guitarra y termino (para eso tengo que empezar, of course) el trabajo.

Farewell, my readers!

sábado, 6 de junio de 2009

Poseidón o la furia

Querida Bitácora:

Ni bien pisé, firme, tierra entereme que por medios que desconozco se han publicado datos míos en lo que pareciera ser un pasquín de tan obscuro origen como circulación, sin hacérseme entrega de las regalías correspondientes.

Comprendo que la plebe enfervorizada haga uso y abuso de mi eximio nombre, que siempre abre una puerta o dos….-ya en la tercera es más difícil que atiendan a quién lo esgrima- lo que no comprendo es que los responsables del pasquín antes mencionado no me hayan convocado con la antelación necesaria para una entrevista, atrevida sesión de fotos en posturas sugerentes, firma de autógrafos y entrega de remeras con mi estampa a alguna organización para niños huérfanos discapacitados y enfermos en situación de calle, o algo por el estilo.

Es decir…no fui exhibido como alguien de mi calaña se merece. No me dejaron mostrarle una vez más al mundo que el Kpitán por sobre todas las cosas –y por sobre todas las gentes- es un filántropo desinteresado y desprendido que apoya las causas más nobles. Yo, nobilísimo ser humano, causa de las causas, motor inmóvil y primero, ¿no puedo acaso hacer despliegue de mi humildad y paternalismo? ¿no tengo acaso el derecho de mostrar mi contribución a la sociedad? ¡Justamente ahora que vengo de haber dado trabajo a más de mil niños de países subdesarrollados en las acogedoras fábricas en las que se fragua mi línea Nautique! Díganme si eso no es un aporte ¡Diganmelón! Explíquenme cómo podrían esos miles de niños pagarse los estudios universitarios sin el ahorro que trabajar 12 hs por día entre los 7 y 18 años –esa es la edad en la que, cual arcilla, son más maleables en las manos de este buen cristiano- les permite. ¡Cómo llegarían a ser los líderes del mañana!

En fin, querida bitácora que siempre me escuchas, como todo hombre de avanzada soy incomprensible para mi generación. Sólo tú me conoces, sólo tú sabes de mí que, confidente, acaricio tus renglones con el filo de mi pluma, mientras las lágrimas -que el verme injustamente privado del reconocimiento que mi bajo perfil y proverbial modestia exigen a gritos- brotan de mis ojos verde esperanza y van a mezclarse con la obscura tinta, surcando de luctuosos ríos estas líneas. Sólo tú sabrás lo que este corazón, tan tormentoso como los mares que he surcado, guarda.

Dejaré pasar esta afrenta a quién sea responsable de la divulgación de mis datos, a quién ladinamente haya querido hacer uso de mi nombre para trascender su condición de ignoto mortal. Perdónolos, no saben lo que hacen. Yo seguiré trabajando desde la sombra, pues no he nacido para fustigar mi terso cuerpo bajo los inclementes rayos del sol de medio día.

¡Usad, anónimos truhanes, mi nombre y aquella foto de mi tierna infancia que mi madre guardara con tanto cariño en su canastilla de bordado! Aquella en la que, tierno crío aún, me abandonaba a los placeres de la merienda que cada jornada se me proporcionaba en las viñas del tórrido amante de mi nodriza.

Sé, Bitácora en la que desahogo mis penas, que un día la vida se cruzará en el camino de estos seres sin escrúpulos y ese día ¡oh, B! ese día,

Será justicia.

Talking about one-self and one's significant other(self)

Bueno, gente, esto es así, hace mil que vengo pensando en hacer un blog.....todos tienen uno!!! No, en realidad todo va un poco más allá de esa razón de ser humano masificado. Hace mucho yo escribía...después entré a la carrera de Letras y, paradójicamente me dediqué más a leer que a escribir. No sé por qué. Y no es que, como el cieguito, me sienta más orgullosa de lo que leí que de lo que escribí. Es simplemente que me dio pánico escénico o que me agarra taquicardia frente a la hoja en blanco.

La idea de esto es volver a escribir algo...lo que sea... y, por qué no, comenzar a interesar a futuros compradores de mis libros (así gano mucho, me puedo pagar todos los viajes que quiero hacer, dejo la docencia de lado, me compro una casa en la playa, me dedico al montañismo -cuando no sea temporada de playa- y muchas cosas más que me permitirían unos cuantos de cientos de miles de pesos -euros- más. Lets face it: la fe mueve montañas, pero la plata mueve el mundo!!!). En fin, no sé si lograré interesar compradores, si habrá seguidores del blog....si yo misma lo seguiré...qué sé yo. Se me cancelaron los planes de este fin de semana. Tres veces (sisi, es triste), así que dije...por qué no comenzar un blog y ver si Internet no se cae y me quedo sin esto también!! jaja.

Bueno, ya saben quién es Ro Ro....al menos lo saben los que me conocen (que con suerte serán los que van a leer esto). El Kpitán no es tan famoso, a pesar de que él quiera creer que su nombre es de público conocimiento y respeto.

Primero que nada quiero aclarar que el Kpitán nació mucho antes de que esa K adquiriera el sentido que tiene ahora en la Argentina. Eso es lo malo de crear un personaje a los 13 años y hacerlo público a los 24 cuando su fatídica inicial es un suplicio (si, suple letras, sílabas y hasta palabras y descompone a cualquiera por tanto uso indiscriminado) propio de los medios de comunicación y, lo más peor aún, es la inicial de dos gobiernos o uno solo pero en dos partes (y si la primera fue mala, la secuela es mucho peor -it was ment to be this way, people!). Como dije, un comodín o una mala rutina política. La K. Pero bueno, el Kpitán Sánchez nació con ese nombre y así tendrá que quedar. Obviamente, consideré dejarle en claro a quien me leyera que este blog no es una apología de ningún gobierno. No es lo que Virgilio a Augusto o lo que García Márquez a Castro.

No voy a decir mucho más en esta entrada....al Kpitán Sánchez lo irán conociendo de a poco. A mi también. Es cuestión de que lean, muchas veces entre líneas. Este blog no tiene ninguna orientación en particular, ninguna intención de publicaciones regulares ni ninguna reglamentación de ningún tipo. Publico lo que quiero y cuando quiero. Los que lean pueden coparse y comentar o asentir respetuosamente a mis opiniones, guardar un silencio reverencial y esperar ansiosos la próxima entrega.